En su homilía, el Pontífice recordó que, Jesús fue ungido por el Espíritu Santo para anunciar la Buena Noticia a los pobres. “Todo lo que Jesús anuncia, y también nosotros, sacerdotes, precisó el Papa, es Buena Noticia. Alegre con la alegría evangélica: de quien ha sido ungido en sus pecados con el aceite del perdón y ungido en su carisma con el aceite de la misión, para ungir a los demás”. Como todo discípulo misionero, agregó el Obispo de Roma, el sacerdote hace alegre el anuncio con todo su ser.

En este sentido, la Buena Noticia puede parecer una expresión más, entre otras, para decir Evangelio – afirmó el Papa Francisco – como buena nueva o feliz anuncio. Sin embargo, dijo, contiene algo que cohesiona en sí todo lo demás: la alegría del Evangelio. “La Buena Noticia es la perla preciosa del Evangelio. No es un objeto, es una misión. La Buena Noticia nace de la Unción. La primera, la gran unción sacerdotal de Jesús, es la que hizo el Espíritu Santo en el seno de María”. La Buena Noticia. Una sola Palabra – Evangelio – que en el acto de ser anunciado se vuelve alegre y misericordiosa verdad. Por ello, advirtió el Pontífice, que nadie intente separar estas tres gracias del Evangelio: su Verdad – no negociable –, su Misericordia – incondicional con todos los pecadores – y su Alegría – íntima e inclusiva –.

Texto y audio completo de la homilía del Papa Francisco: http://es.radiovaticana.va/news/2017/04/13/homilia_papa_francisco_-_jueves_santo_-_misa_crismal_-_13_04/1305419