Luego del acto de apertura, se desarrolló el primer panel de disertantes, titulado “¿Por qué es necesario un pacto social a nivel nacional?”.
El doctor en Ciencia Política y director del programa Estado y Políticas Públicas de la Universidad Nacional de San Martín, Carlos Acuña, se refirió a la necesidad de reconocer la responsabilidad del Estado para lograr el sostenimiento del Pacto Social en el tiempo.
La función del Estado, explicó, no se limita al armado de los pactos, sino que debe resolver los problemas entre los diversos actores e intereses. En ese sentido, consideró que “una pieza esencial para que el Pacto sea exitoso apunta a una construcción institucional que dote al Estado de capacidad para sostenerlos”
Para ello, consideró fundamental el valor de la gestión pública; la capacidad de planificación; y los desafíos de coordinación, que implican “la capacidad de abordar problemas multicausales que demandan a diversas áreas del Estado”. Sin estos tres elementos, afirmó, “minamos la probabilidad de éxito de cualquier pacto”.
Por su parte, José Urtubey, Premio Konex 2018 a Dirigentes Empresarios, miembro del Comité Ejecutivo de la Unión Industrial Argentina, hizo hincapié en la necesidad de un desarrollo sustentable como marco del Pacto Social: “El crecimiento debe ser acompañado por una fuerte inclusión social y el tema medioambiental. Pensar en las próximas generaciones es la clave del pacto social”.
En ese sentido, llamó a “superar las viejas antinomias y dirigirnos hacia una mirada integral y federal”.
A su turno, Carlos Ianizzotto, integrante de la Mesa Ejecutiva de la Corporación Vitivinícola Argentina (Coviar) y presidente de Coninagro, consideró que la justicia en la Argentina es una materia pendiente. “No hay estructura social ni país que pueda existir sin la justicia y la solidaridad. Y lamentablemente si no hay justicia es muy difícil que exista la solidaridad”, expresó. “Nos tenemos que hacer cargo todos, también el campo, y aquí estamos presentes en el lugar que corresponde”, afirmó.
“Estamos creando pobreza y desigualdad para el productor y para el consumidor. Si no hay en la Argentina movilidad social, hay generaciones y generaciones que no tienen futuro ni posibilidades de desarrollarse”, advirtió.
En ese sentido, consideró: “En este pacto social tenemos que volver a ser originales, que significa volver a nuestros orígenes, a entablar un profundo diálogo para fortalecer a la sociedad, que ha sido la característica de nuestro país; la solidaridad entre el movimiento obrero, industrial y capital. Tenemos que reestablecer esa alianza de diálogo social”.
“Tiene que haber un Estado ágil que busque el bien común y no las maniobras políticas. Hoy la política no está orientada a lo que el pueblo realmente necesita y necesitamos de un Estado presente y sobre todo con aquellos que más lo necesitan”, afirmó Ianizzotto.
“El cooperativismo puede ser también un instrumento para lograr la integración: es símbolo de comunidad organizada, y un signo del capital social, porque no nos une la renta sino el interés por prestar un buen servicio. Con sencillez podemos aportar a nuestra nación el dialogo, la solidaridad y el consenso que necesitamos”, concluyó.
El secretario general de la Confederación General del Trabajo (CGT), Héctor Daer, por su parte, llamó a preguntarse “¿Qué dirección le damos a nuestro país?”. En tal sentido, llamó a poner la mirada en la investigación y el desarrollo. “A la fe le vamos a poner esperanza, y a la esperanza voluntad y futuro. El desarrollo integral de nuestro país va a permitir que nuestros compatriotas puedan realizarse cada uno en el lugar que nacieron, y esto es una mirada transformadora de fondo”, consideró.
“Somos muchos sectores, pero somos muy democráticos, porque dialogamos con todos intentando generar debate y consenso, y todos queremos esta mirada de país. No importa si hay matices en el movimiento obrero, porque hay unidad de criterio: queremos una Argentina distinta”, sostuvo, y concluyó: “Hay que tener la voluntad política de transformar la Argentina”.